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Foto del escritorEl Halcón

Crítica: Todos Tus Muertos - "Nena de Hiroshima" (1991)

Géneros: punk rock, rock gótico; reggae


Miembros:

Fidel Nadal: voz

Félix Gutiérrez: bajo

Julio Amin: guitarra

Jorge Iacobellis: batería


Productores: Jorge Iacobellis y Amilcar Gilabert


Discográfica: Radio Trípoli


Lista de canciones:

01 - Incomunicado

02 - Abre la celda

03 - Break On Through (cover de The Doors)

04 - Terror al cambio

05 - Fallas

06 - El Ritmo en la sangre

07 - Se que no

08 - El Espejo

09 - El Chupadero


Para los inicios de la década de los 90´s, en Argentina el ambiente musical estaba muy activo: los Ratones Paranoicos era el grupo que estaba en boca de todos, compitiéndole en convocatoria a titanes como Soda Stereo y Los Redonditos de Ricota, Rata Blanca pegaba el exitazo con su power ballad "Mujer Amante" y Walter Giardino se consolidaba como el guitarrista más virtuoso, las escenas del metal y el "rock rollinga" empezaban a desarrollarse paso a paso y a ganar más peso, con Hermética a la cabeza por un lado y el comienzo de La Renga y Los Piojos por el otro, a su su vez, Charly Garcia terminaba su época dorada y comenzaba su momento más errático, tanto musical como personal. Y solo por nombrar lo más importante, ya que también se iban gestando otros géneros. Dejando de lado los gustos, es innegable que la década empezó con una fuerza arrolladora, con propuestas por todos lados... ¿Pero qué pasaba con el punk? con la salida del compilado "Invasión 88" muchas bandas pudieron darse a conocer y comenzar una carrera musical sólida, obteniendo la posibilidad de grabar material en estudio. Sumémosle a esto, la llegada del hardcore punk de Estados Unido,s que de a poco iba a generando una influencia en músicos jóvenes, como resultado, tenemos una escena que poco a poco iba sumando adeptos, aunque de manera más lenta, por ejemplo, que en el metal. En medio de todo esto, TTM, que venía ganando seguidores y sobresaliendo cada vez más en el under, gracias a la exposición de "Gente que no", sufre un quiebre: Gamexane y Cristian Ruíz dejan la banda, entonces Félix busca dos suplentes para la grabación de su segundo LP. Con la formación reagrupada con Julio Amín en guitarra y Jorge Iacobellis en batería, graban lo que es, en mi opinión, el álbum más oscuro de todo el rock argentino: "Nena de Hiroshima".





En este trabajo, a las composiciones propias y actuales, se le suman composiciones que habían quedado de los primeros años, hechas por Jorge Serrano, un miembro antiguo de la banda. Si bien, la salida de Gamexane provocó que el audio de guitarra no suene tan crudo y sucio como en el disco debút, Amin se las ingenia, con un gran talento, para lograr su propio sonido personal, más pulido y mejor tocado que Game, pero sin perder la pesadez, ni ese toque sombrío que tenía el predecesor. Es más, por momentos lo acentúa. Musicalmente, el disco es pesado: tenemos momentos punk rock clásico y acelerones hardcore ("Abre la celda" y "El Chupadero"), tenemos ese reggae infaltable, esta vez con una calidad más notoria ("Se que no") y momentos altamente influenciados por el primer Black Sabbath, con una carga de melancolía, oscuridad y hasta "doom" por momentos. Toda una combinación más que interesante que le dio ese toque personal a la banda en su momento. Por su parte, Fidel Nadal se libera completamente, saca toda su personalidad y nos brinda momentos muy buenos a nivel vocal, sin que sea necesario mejorar en técnica, sino que explotando al máximo los recursos limitados que tiene. Félix tiene sus momentos como siempre, gran bajista, sin embargo esta vez no está tan presente como en el álbum anterior, supongo que debió ser por la mezcla o la producción. Los nuevos integrantes se la bancan muy bien, Iacobellis nos muestra una técnica de la puta madre (dentro del género), varía los recursos de su batería y marca el ritmo de manera contundente. De Amín ya hable más arriba, se nota su habilidad como guitarrista. Si bien sus solos son escasos, siempre encuentra un momento para meter un punteo o algún detalle que nos deja ver la diferencia que tiene con Gamexane, quizás este último siendo mas "bruto" en su manera de tocar; ya que lo nombro, dejo sus aportes como compositor en los temas "El Chupadero"; "Se que no" y "Abre la celda", todas ellas con esa sensación de que pertenecen a él. La producción, a cargo del propio baterista, es un progreso, suena mucho mejor que el trabajo anterior y cada instrumento se aprecia, sobre todo la batería, que cuenta con un sonido muy arriba. Un detalle de color, pero que al mismo tiempo me parece interesante, es que al parecer, Fidel quería que en el disco toque Pablo Molina, miembro que a partir de "Dale Aborígen" saldría como segundo cantante y percusionista oficial, pero que en esta etapa solo era amigo de la banda, según cuenta el propio Molina en una entrevista, la negativa de que en este álbum el no toque fue desición de Iacobellis, dejándolo afuera de la grabación... y me parece una desición acertada, no tengo nada en contra de Pablo, y es mas, su entrada definitivamente le dio a la banda ese último elemento que les faltaba para ser un grupo de renombre, pero en este contexto su participación hubiera estado de más. El estilo y ambiente tan podrido que se nota en el disco hubiera quedado tirado a la basura si hubieran agregado otro cantante o algún instrumento de percusión, al menos en mi opinión. Dejar una alienación clásica de guitarra, voz, bajo y batería quedo perfecto.




Pero si la música ya estaba llevada a un costado oscuro, como vengo remarcando, las letras sin dudas son el detalle que cierra este concepto, y para mi, es lo más importante del trabajo. En el antecesor ya tuvimos mala onda, pesimismo y cosas por el estilo, pero enmarcadas en un plano social, a lo crítico de la situación como país. Esta vez se orientan a cuestiones mucho más personales, es un disco muy reflexivo, creo que si te agarra en un mal momento de tu vida es probable que te pegue fuerte, o al menos seguro te hace pensar sobre determinadas cosas o situaciones. Cada canción está cargada con letras pesimistas sobre, entre otras cosas, las fallas que tenemos como personas, momentos de vulnerabilidad muy puntuales, reflexiones sobre un cambio de vida y, como siempre, esa fascinación por la muerte y los cuerpos inertes, teniendo más protagonismo que en el disco anterior. Si bien tenemos momentos de crítica social puntuales, son los de menos, es un viaje que, al menos en lo personal, fue muy duro de escuchar y me dejó muchas cosas en la cabeza para pensar. Solo tengo dos cosas que no me cierran: el inicio con "Incomunicado", que si bien es bueno, no le hace justicia al resto del disco y el cover de The Doors, que simplemente lo veo innecesario, no me parece que tenga nada que ver con el tono del disco, no digo que es malo, solo que esta demás. Sacando estos "baches", desde "Abre la celda" hasta el final tenemos tema tras tema que no dan respiro, letras duras y afiladas, acompañadas de una música devastadora. La verdad es que si destaco una canción sobre otra es solo por gustos personales, que se yo, "El Chupadero" es el más pesado de todo el disco, pero al mismo tiempo el más "para arriba", con una letra crudísima sobre los centros de detención de la dictadura militar de los 70's y el estado miserable de los que se encontraban ahí atrapados. Por su parte, "Se que no" es el único reggae, que parece que va a ser un alivio ante la mala onda de los otros temas, pero tiene una letra de desamor que puede hacerte mierda si acabaste de terminar una relación, aparte de eso, me encanta ese punteo que mete Amin a mitad del tema, me hace acordar a una parte en especial de la canción de Van Halen, "Push Come to Show". Pero, principalmente destaco "El Espejo" y "Fallas", las más reflexivas y pesimistas de toda su carrera y un verdadero golpe bajo. No tengo más para agregar, recomiendo totalmente este trabajo, es una etapa de la banda que no es muy recordada y que fue opacada por lo que vino después, pero tranquilamente puede entrar en un top 10 de mejores discos del punk argentino; es una obra casi perfecta que te sumerge en el costado mas terrorífico y negro del grupo. Si querés escuchar al TTM más brutal, a Fidel en su mejor momento y encontrarte con unas letras que te invitan a pensar un poco más en vos mismo y no solo palazos a la sociedad, te vas a llevar una alegría. O llanto, en este caso.


Puntuación: 9/10




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